Misterio de Navidad

Entonces Herodes, llamando en secreto a los magos, les interrogó cuidadosamente sobre el tiempo de la aparición de la estrella, y, enviándolos a Belén, les dijo: «Id a informaros sobre ese Niño, y cuando Le halléis, comunicádmelo, para que vaya también yo a adorarle.» Después de oír al rey, se fueron, y la estrella que habían visto en Oriente les precedía, hasta que, llegada encima del lugar en que estaba el Niño, se detuvo. Al ver la estrella, sintieron grandísimo gozo. Y, entrados en la casa, vieron al Niño con María, Su Madre, y de hinojos Le adoraron, y, abriendo sus cofres Le ofrecieron dones: oro, incienso y mirra. Advertidos en sueños de no volver a Herodes, se tornaron a su tierra por otro camino. Monasterio del Magnificat de la Madre de Dios CP 4478 Mont-Tremblant QC J8E 1A1 http://www.magnificat.ca © Éditions Magnificat 1212-504-2657 Imprimé au Canada

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