Oh Virgen María, Sol sin mancha, Os felicito y me alegro con Vos
que en Vuestra Inmaculada Concepción Dios Os ha dado una gracia
más alta y abundante que las de todos los Ángeles y Santos, en el
punto más alto de su perfección. Agradezco a la Santísima Trinidad,
y admiro Su infinita bondad, por haberos concedido esta insigne
prerrogativa. Ah, hacedlo, Virgen Santa, para que corresponda
siempre a la gracia divina y no abuse nunca de ella: cambiad mi
corazón, para que empiece, desde este momento, a corregirme.
3 Ave María…
¡Bendita sea la Santa e Inmaculada Concepción
de la Santísima Virgen María!