Gran San José, cuyo corazón estaba siempre lleno de
caridad hacia el prójimo, que, olvidando tus propios
intereses, sólo pensabas en las necesidades de tus
hermanos y en la salvación de sus almas, consíguenos, te lo
rogamos, esta virtud de la caridad, carácter distintivo de los
cristianos. Que practiquemos la mansedumbre con nuestro
prójimo; que evitemos lo que pueda causarle dolor; que
reprimamos nuestro egoísmo, para estar siempre en la santa
disposición de prestarle servicio y dedicarnos a él. San
José, ayúdanos y obtén para nosotros la gracia de…