Si no encuentra lo que busca,
puede enviar un correo electrónico:
apotres@magnificat.ca
Magníficat!
¡Para la preservación del Depósito de la Fe!
¡Para que venga el Reino de Dios!
Una representación única del Belén.
Poco antes de morir, Jesucristo anunció a sus apóstoles la destrucción del Templo de Jerusalén, asegurándoles que no quedaría ni una sola piedra en pie. Varias profecías añadían que, tras su destrucción, el Templo no volvería a ser reconstruido. En el año 70 los romanos destruyeron la ciudad y el templo. Para destruir el valor de la palabra de Dios, el emperador Juliano el Apóstata intentó reconstruir el templo de Jerusalén en el año 361. Vinieron trabajadores de todas partes, especialmente un gran número de judíos, y ya se estaban levantando los muros del templo. Juliano triunfó y con él los enemigos del cristianismo. Pero la alegría duró poco, pues un terremoto derribó el santuario inacabado. Sin embargo, comenzaron de nuevo, pues el odio al cristianismo cegó a Juliano y a su partido. Pero un terremoto más terrible y globos de fuego que emergen de la tierra amenazan con engullir a los trabajadores. Las obras tuvieron que suspenderse, y el templo no se ha reconstruido hasta hoy.
Dios es fiel y cumple Sus promesas.
LOCALIZACIÓN:
290 7e rang Mont-Tremblant QC J8E 1Y4
CP 4478 Mont-Tremblant QC J8E 1A1 Canada
(819) 688-5225
(819) 688-6548
WordPress multillingüe con WPML