Para la preservación del Depósito de la Fe.

¡Para que llegue el Reino de Dios!

MAGNIFICAT

La Orden del Magníficat de la Madre de Dios tiene la siguiente finalidad especial la preservación del Depósito de la Fe a través de la educación religiosa en todas sus formas. Dios la ha establecido como «baluarte contra la apostasía casi general» que ha invadido la cristiandad y en particular la Iglesia romana.

Filter by Categories
Liturgia-es
Oración
Evangelio-Lecturas
Reflexiones
Historia

Este artículo también está disponible en: Français English Italiano

Oración al Sagrado Corazón de Jesús y al Sagrado Corazón de María por la conversión de los pecadores.

Jesucristo, que tanto sufrió por la salvación de todos los hombres, Se apresura a responder a las oraciones que ofrecemos por la conversión de las almas perdidas.

Sagrado Corazón de Jesús, que ardéis en tan ardiente amor por los hombres, y que sois tan poco amado por ellos, ¡cómo podré, con mi fervor, consolaros por la ingratitud de todos estos cristianos culpables! Vuestro Corazón, siempre tierno y compasivo, ¿estará siempre cargado de dolor por los males que Vuestros hijos se acarrean con sus desórdenes y crímenes? Yo sé, ¡oh Salvador mío! Vos amáis que se Os ruegue por los pecadores, porque por ellos Os humillasteis y Os resignasteis a todas las humillaciones de Vuestra vida y a los tormentos de Vuestra Pasión, porque queréis que se conviertan y vivan. Por muy culpable que yo mismo sea, me acerco con confianza al trono de Vuestras misericordias, esperando firmemente que no rechazaréis las oraciones que Os dirijo por estos desgraciados.

Sagrado Corazón de Jesús, tened piedad de los pecadores, tocad sus corazones endurecidos, abrid sus ojos cegados por sus pasiones, hacedles ver el abismo en el que se precipitan. Piedad, piedad, ¡oh Dios mío! suspended Vuestros golpes. Misericordia, Señor, misericordia! ¿Acaso los pecadores no son Vuestros hijos? Oh Dios mío, no los abandonéis, y ya que la sangre de Vuestro Hijo fue derramada por ellos, que no sea en vano. Recibid, en expiación de sus crímenes, los sufrimientos de Jesús, las oraciones, las buenas obras, las comuniones de tantos cristianos fervorosos, a los que me uno con toda la fuerza de mi alma. Quiero vivir sólo para amaros, feliz si pudiera morir de amor a Vos, y compensaros por la frialdad de tantos cristianos, que no Os aman porque no Os conocen.

¡Oh Corazón Inmaculado de María! Corazón de esta augusta Virgen que la Iglesia llama con razón Refugio y Abogada de los pecadores, unid Vuestras súplicas a mis débiles plegarias para hacer santa violencia al Corazón de Jesús. Oh María, pongo mis súplicas en Vuestro Corazón; dignaos presentarlas al Juez soberano, a Aquel a quien llevasteis en Vuestro seno virginal, a Aquel cuyas sublimes virtudes imitasteis tan bien, a Aquel a quien amasteis tanto, y yo estoy tranquilo en la dulce esperanza de que serán atendidas. Amén.

Comparte con los tuyos

¿Ha visto estas publicaciones?

Letanías a Nuestra Señora de Lourdes

En todas nuestras necesidades, imploremos a nuestra buena Madre del Cielo, que obra prodigios de gracia cada día en el lugar bendito de Lourdes, donde nos manifiesta Su amor de manera especial.

Ver »

Señal de la Cruz

En el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo y de la Madre de Dios. Amén.

Oración preparatoria

¡Oh Jesús! Vamos a caminar con Vos por el camino del calvario que fue tan doloroso para Vos. Háganos comprender la grandeza de Vuestros sufrimientos, toque nuestros corazones con tierna compasión al ver Vuestros tormentos, para aumentar en nosotros el arrepentimiento de nuestras faltas y el amor que deseamos tener por Vos.
Dígnaos aplicarnos a todos los infinitos méritos de Vuestra Pasión, y en memoria de Vuestras penas, tened misericordia de las almas del Purgatorio, especialmente de las más abandonadas.

Oh Divina María, Vos nos enseñasteis primero a hacer el Vía Crucis, obtenednos la gracia de seguir a Jesús con los sentimientos de Vuestro Corazón mientras Lo acompañabais en el camino del Calvario. Concédenos que podamos llorar con Vos, y que amemos a Vuestro divino Hijo como Vos. Pedimos esto en nombre de Su adorable Corazón. Amén.