Para la preservación del Depósito de la Fe.

¡Para que llegue el Reino de Dios!

MAGNIFICAT

La Orden del Magníficat de la Madre de Dios tiene la siguiente finalidad especial la preservación del Depósito de la Fe a través de la educación religiosa en todas sus formas. Dios la ha establecido como «baluarte contra la apostasía casi general» que ha invadido la cristiandad y en particular la Iglesia romana.

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Oración para pedir la paz

Oración para pedir la paz por San Francisco de Asís

«Bienaventurados los que procuran la paz, pues ellos serán llamados hijos de Dios», dice Jesús. Pidamos ser instrumentos de paz.

SEÑOR, HACED DE MÍ UN INSTRUMENTO DE VUESTRA PAZ.
Donde haya odio, que yo ponga el amor;
Donde haya ofensa, que yo ponga el perdón;
Donde haya discordia, que yo ponga la unión;
Donde haya error, que yo ponga la verdad;
Donde haya duda, que yo ponga la fe;
Donde haya desesperación,
que yo ponga esperanza;
Donde haya tinieblas, que yo ponga la luz;
Donde haya tristeza, que yo ponga la alegría;
¡OH! SEÑOR, QUE NO BUSQUE YO TANTO…
A ser consolado sino consolar,
A ser comprendido sino comprender,
A ser amado sino amar.

PORQUE ES……
dando que se recibe,
olvidándose que uno se encuentra a sí mismo,
perdonando que se recibe el perdón,
y muriendo a sí mismo que se resucita a la vida.

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En el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo y de la Madre de Dios. Amén.

Oración preparatoria

¡Oh Jesús! Vamos a caminar con Vos por el camino del calvario que fue tan doloroso para Vos. Háganos comprender la grandeza de Vuestros sufrimientos, toque nuestros corazones con tierna compasión al ver Vuestros tormentos, para aumentar en nosotros el arrepentimiento de nuestras faltas y el amor que deseamos tener por Vos.
Dígnaos aplicarnos a todos los infinitos méritos de Vuestra Pasión, y en memoria de Vuestras penas, tened misericordia de las almas del Purgatorio, especialmente de las más abandonadas.

Oh Divina María, Vos nos enseñasteis primero a hacer el Vía Crucis, obtenednos la gracia de seguir a Jesús con los sentimientos de Vuestro Corazón mientras Lo acompañabais en el camino del Calvario. Concédenos que podamos llorar con Vos, y que amemos a Vuestro divino Hijo como Vos. Pedimos esto en nombre de Su adorable Corazón. Amén.