24º domingo después de Pentecostés
El cual grano es ciertamente la más pequeña de todas las semillas; pero cuando ha crecido, es mayor que todas las legumbres, y se hace árbol.
historia1130-El perdón de una ofensa alivia a las almas que sufren
El desconocido sacó inmediatamente su espada, corrió hacia el desafortunado niño, lo golpeó, le clavó la espada en el pecho y lo arrojó al suelo sin vida.
historia1129-Las almas liberadas del purgatorio por sus oraciones lo salvan de una trampa fatal
Asustado de esta confesión, el buen monje pensó que las almas por las que intercedió podían haberle prestado esa ayuda en el momento del peligro.
historia1128-Es mejor morir con la certeza de ir al purgatorio que vivir en peligro de pecado
El asombro de la asistencia no puede rendirse; todos permanecían atrapados por el terror en el lugar donde se encontraban.
historia1127-Gratitud de las almas por sus benefactores
Inmediatamente se produjo un estruendo extraordinario alrededor del vicario espantado; le pareció que los huesos salían de las tumbas del cementerio y se reunían.
historia1126-El valor de las indulgencias
«Ofrecedle, a cambio de la limosna que os hará, que le cedáis vuestro mérito, para que disminuyan las penas que le esperan en el purgatorio.»
historia1125-Sufrimiento de las almas que han dado escándalo
Ciertamente, es doloroso tener que sufrir el castigo de las propias culpas; pero es todavía más doloroso ser castigado por las culpas ajenas.
historia1124-Retribución por una promesa incumplida
«A causa de tu infidelidad, de tu corazón más duro que la piedra, tuve que soportar suplicios inexpresables en el purgatorio.»
historia1123-Purificación inmediata mediante la contrición perfecta
«¡No te demores, Padre! ¡Inmediatamente, inmediatamente! El dolor me rompe, y me muero…» Y, efectivamente, cayó sobre el pavimento de la iglesia y expiró entre sus sollozos.
historia1122-La Madre de Dios, Madre de las almas del Purgatorio
Ante esta conmovedora petición, la Reina del cielo dirigió sobre ella una mirada llena de amor.
